Si viajar es lindo, hacerlo en una van es aún mejor. Y si Galicia es lindo, recorrerlo en una van es aún mucho mejor. ¿Estamos preparados para road-tripear? Díganme que si porque no puedo más con la ansiedad.

Pareciera como si Galicia y gran parte de España están armados especialmente para hacerlo en una campervan. No solo que no te cobran, sino que también te reservan los mejores rincones del país para que te asegures de levantarte a los pies del Océano. Dos aplicaciones de gran utilidad para quienes viajen en van: «Park4night» para encontrar lugares para dormir, y «Tap» para buscar lugares donde puedan cargar agua.

Nuestro primer objetivo, llegar para el atardecer a los estacionamientos para ver la puesta del sol y disfrutar de ese momento para empezar a preparar la cena. Nuestro segundo objetivo, combinar algunas ciudades con algunas playas y algunos parques naturales. En fin, un poco de todo, pero eligiendo la costa para acampar.

4 Lugares para ver en el Norte de Galicia

1- Santiago de Compostela

La capital de Galicia es una parada obligada, y el hecho de que esté bien conectada con muchos destinos hace que sea la gran puerta de entrada a la región. Vale destacar que es el segundo aeropuerto con más tráfico en el norte de España después del de Bilbao. Caminar por el centrito de la ciudad es realmente una belleza, y a su vez es conocida porque acá termina el famoso «Camino de Santiago», donde se supone que se encuentran los restos del Apóstol Santiago.

La parte antigua de la ciudad fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1985 y es es considerada una de las tres ciudades de peregrinación más importantes para el cristianismo junto con Roma y Jerusalem. Todo lo imprescindible para visitar está muy cerca, pero obviamente les recomiendo visitar la Catedral y si pueden entren ya que se accede de forma gratuita.

Si bien se encuentra en refacción, se puede admirar su gran tamaño y algunos espacios muy interesantes como la Bóveda de la Capilla del Pilar. Otras atracciones son el Parque Alameda, la Ciudad de la Cultura, el Centro Gallego de Arte Contemporáneo, Pazo de Raxoi, el Monasterio y la Plaza de los Vivos y los Muertos.

2- Playa de las Catedrales

La Playa de las Catedrales es simplemente una locura, y probablemente la visita natural estrella del norte de Galicia. Ubicada en la Provincia de Lugo, en el Municipio de Ribadeo y frente a la Costa del Mar Cantábrico, la también conocida Playa de Aguas Santas no deja de sorprender.

Tengan en cuenta que en ciertas épocas hay que reservar, y no pasen por alto tener a mano los horarios de Pleamar y Bajamar (marea alta y baja). Esto se debe a que generalmente van a poder acceder a la playa principal, pero para caminar por la costa y disfrutar de estos «monumentos naturales» necesitan que haya marea baja, ya que sino son inaccesibles. La marea es muy fuerte y no van a poder llegar.

¿Qué tiene este lugar que lo hace tan especial? Unas rocas gigantescas que forman arcos de más de treinta metros de altura y torres que tienen una gran semejanza a la de los templos cristianos.

El lugar está lleno de cuevas para los curiosos, acantilados, grutas y más. La única precaución, si se van caminando muy lejos cuando la marea está baja, no olviden volver antes de que empiece a subir. Si no, van a estar en problemas…

3- Fragas do Eume

Ubicado en la Provincia de Coruña, Fragas do Eume fue declarado Parque Natural en 1997 y se caracteriza por ser un lugar ideal para hacer senderismo bordeando el verdoso Río Eume. Por un lado del río se puede hacer un senderismo sobre la ruta asfaltada, mientras que por el otro el recorrido es un poco más exigente.

También está la opción de ir en coche (averigüen bien según la época) y estacionar cerca de algunas de las mesas sobre el río para admirar el paisaje. Las atracciones más destacadas son los puentes colgantes peatonales y las vistas desde el Monasterio de Caaveiro.

Ya sea antes o después de visitar el parque, si pueden tómense unos minutos para caminar por Pontedeume. Queda muy cerca del parque, y es un pequeño pueblito costero donde pueden caminar bordeando el agua y viendo como los botes quedan sobre la arena cuando baja la marea.

4- Coruña

Coruña tiene cosas muy interesantes, pero claramente no debería ser la prioridad a nivel turístico. Ahora bien, ¿qué si hacer en Coruña? Primero, vamos a lo importante: cómanse un buen Pulpo a la Gallega, créanme que no falla.

Después les recomiendo que caminen un poco por la Ciudad Vieja, donde van a encontrar el puerto, la hermosa Calle Riego de Agua por la cual van a llegar a la Plaza de Maria Pita, probablemente una de las atracciones imperdibles de la ciudad. Acá van a encontrar tanto el Monumento a María Pita (la heroína que defendió a la ciudad contra los ingleses) como el atractivo edificio que alberga el Museo de los Relojes.

Por último, vayan hasta la Torre de Hércules o diríjanse a la playa céntrica de Coruña que es una belleza total. Amplia y extensa como pocas, tiene un color de agua impensado para una playa de ciudad. Se las conoce como Playa del Orzán y Playa de Riazor y se las recomiendo fuertemente.

Por último, si pueden no dejen de visitar el Mirador Ventana al Atlántico. Si bien queda un poco alejado de la ciudad, este es uno de los mejores lugares para ver un atardecer de película. El sol se pone sobre el mar, y para colmo hay una especie de «cuadro» hecho de piedras de gran tamaño para que nos paremos dentro de él con el sol de fondo. Simplemente un lugar hecho a medida, y si además contemplamos que podemos acampar acá ya pasa a ser más que interesante.

Otros lugares para ver en Galicia

La Comunidad Autónoma de Galicia, como se imaginarán, tiene muchas atracciones. Estas fueron las que elegimos nosotros, pero si pueden visiten Lugo, Pontevedra, Islas de Cíes, Vigo, Cabo Finisterre, O Cebreiro, Cañón del Sil y Ourense.

Bitácora – Viajar en una Van

Llego la hora de la verdad, mi primer experiencia! Pasé años y años soñando con armar mi propia van y llegar de Argentina a Alaska, pero la falta de presupuesto complicó el sueño! Pero un sueño que siempre está ahí, latente. Estoy seguro que ya le llegará su hora, y de hecho le llegó un anticipo, una muestra gratis en Galicia! Vuelo de punta a punta Malaga – Compostela era la pauta que arrancaba el partido llamado “mis primeros días viviendo en una van”.

Feché (amigo desde el arenero) y Gio (su novia) me levantaban con el “Rada” por el aeropuerto y arrancaba ese hermoso road-trip. El Rada forma con línea de 3 adelante, conductor y dos más! Entonces claro, el debate está garantizado! El mate va y vuelve al ritmo del limpia parabrisas mientras que por la punta se escucha que sale tímidamente un paquete de papas fritas. Qué kilombo! 

Primera parada, Santiago de Compostela! La primera tarde era de ciudad y no nos íbamos a quejar! Las calles laberínticas nos obligaban a perdernos, pero en Santiago todos los caminos llevan a la Catedral, y justo ahí nos encontrábamos! Para nuestra gran sorpresa, entrar era gratuito y la cola era nula, así que como se imaginarán… entramos! Inmensa pero completamente en refacción, es mejor desde afuera! Caminamos por la plaza de los vivos y la de los muertos, por el monasterio y un poco más para volver a subirnos a nuestro querido “Rada”. La emoción era esa, y lo que venía marcaba mis grandes momentos del viaje! Esa  hermosa sensación de buscar unos pocos minutos antes de la puesta del sol el mejor lugar para dormir, aquel en el que se disfrute un buen atardecer o un mágico amanecer frente a las costas del atlántico. Hacer una picada, tomar unos vinitos y charlar solos siendo los dueños del camping no tiene precio! 

También tiene su sacrificio! Ser ordenado, lavar a cada minuto para que no se junte basura, aprovechar bien el agua, tener siempre cargado el bidón de «agua limpia» y dentro de todo tratar de que no rebalse el de «agua sucia», encontrar el lugar ideal para ducharse y hacer malabares con las baterías! Quiero este desafío! Capas debería entender un poco más de mecánica, o capas que no y me chocaré la cabeza contra la pared unas cuantas veces! 

El viaje sigue, y pasamos por la ciudad de Coruña, donde visitamos el puerto y comimos un tremendo y clásico pulpo a la gallega! Después fuimos al Parque Natural Fragas do Eume y el “Rada” se la bancó como un campeón! Pozos, acantilados y muy poco margen para circular nos ponían a prueba, pero la camper respondía! 

Obviamente tampoco podíamos saltearnos la magnífica Playa de las Catedrales, unas formaciones rocosas de otro planeta, las clásicas mareas altas y bajas nos mareaban en la previa y un mar violento se turnaban para cachetearnos! Qué lugar tan fantástico! Pero la verdad es que yo seguía enceguecido viviendo mi propia aventura! Quería ir rápidamente a buscar el siguiente spot para acampar y perder la cuenta del tiempo mirando el mar y escuchando las olas, y así fue. Me quedé encallado en la silla con la mirada perdida por unas buenas horas! No sé si a la mañana me levantaba con la alarma o con el primer rayo de sol que atravesaba la ventanilla, pero les juro que en menos de dos minutos estaba sentado sobre una roca viendo el amanecer! Que lindo y cuánto más feliz me hace conectar con esta hermosa naturaleza! Ojalá haya más de esto, mucho más!