Si hacemos el esfuerzo para llegar a territorio sirio, entonces ir a Bosra es una obligación. Una ciudad ubicada en la provincia de Dara’a, en el extremo sur del país, a unos 145 km de Damasco y muy cerca de la frontera con Jordania que sin lugar a dudas vale la pena visitar. ¿Qué ver en Bosra? ¿Qué tan seguro es ir hasta allá? ¿Es verdad que hay uno de los mejores Teatros Romanos del mundo? ¿Ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad? Allá vamos…
¿Cómo ir a Bosra desde Damasco?
Como se imaginarán, aunque la situación en Siria está algo mejor que hace unos años, sigue siendo un país riesgoso donde la situación puede cambiar rápido de un momento al otro. Obviamente tampoco son muchas las opciones que tenemos para llegar hasta ahí, y lo más probable es que vayamos en auto desde Damasco, un recorrido que nos llevará alrededor de 2 horas por el cual pasaremos por una gran cantidad de controles y checkpoints. Es normal que los militares nos pidan nuestros datos y los del conductor, y hasta intenten llamarlo al celular para verificar que sea el correcto. Dicho esto, camino a Bosra y faltando bastante poco para llegar, explotó una mina terrestre al lado de la ruta y por suerte llegamos 5 minutos tarde. La gente salía de las casas con ametralladoras en mano y nos pegamos un buen susto, pero no pasó a mayores.
Que ver en Bosra
Lo primero que tenemos que ver es el tremendo Teatro Romano de Bosra, a mi criterio una atracción impresionante que dice mucho del lugar y del país. Recordemos que Siria era un país muy turístico antes de la guerra, y por ende vamos a encontrar varios lugares imponentes en medio de poblados y ciudades totalmente destruidas. Bosra, es una de ellas. Es muy loco estar en el enorme Teatro Romano de Bosra y tenerlo todo para mí; pero obviamente casi nadie decide adentrarse en estas tierras hasta que la situación no se estabilice por completo.
En el pasado, Bosra era una ciudad muy próspera que llegó a ser considerada como la capital norte de los Nabateos y supo tener una población de alrededor de 50.000 personas. Era una parada obligada en la ruta de caravanas que transitaban desde Arabia; y nos han dejado como reliquia el Teatro Romano de Bosra, una obra de arte que se conserva en gran estado hasta la actualidad. El mismo tenía una capacidad de 17.000 butacas, uno de los teatros romanos más impresionantes y mejor conservados que quedan en pie al día de hoy. Además, al ser construido en Basalto ayuda a que se conserve de la mejor forma posible y hace que esté lo mas parecido posible a como estaba en sus orígenes.
Hoy en día no hay nadie a cargo del lugar, no hay que pagar ninguna entrada ni hay ninguna oficina ni nada por el estilo. Literalmente no hay nada, simplemente algunos chicos que venden postales al único turista que decide visitar el lugar, y un pintoresco bar frecuentado por locales que se encuentra justo a las afueras del teatro.
El teatro fue construido en el Siglo II después de Cristo, tiene 2 pisos y en la parte inferior contaba entre varias otras cosas con dormitorios. Antes el teatro era muy usado para festivales, conciertos culturales, musicales y eventos públicos.
En el recinto también vamos a encontrar un lugar donde por ejemplo preparaban a los caballos antes de salir a la escena pública, un rincón que se encuentra ubicado abajo de un pórtico donde quedaban listos para el «show». Toda esta zona es un museo al aire libre y hay varios monumentos de cosas que fueron recopilando.
Hoy en día se puede caminar por el escenario, aunque obviamente no van a tener ningún espectador.
La ciudad está dividida en dos; la parte que vendría a ser el nuevo Bosra; y la vieja Bosra. Después del siglo XVI, todas las casas que se encontraban al lado del teatro fueron muy afectadas por un terremoto, y ese es justo el momento en el cual se forma el nuevo Bosra; algo más alejado.
En la parte de la vieja Bosra vamos a encontrar baños públicos, fuentes públicas y la mezquita; y lo que llama mucho la atención es que está todo construido sobre una piedra negra totalmente opuesta a la piedra blanca que caracteriza a Palmyra.
Además, vamos a poder caminar por calle principal de vieja Bosra; donde actualmente vamos a encontrar únicamente restos arqueológicos, y vamos a pasar por la Puerta del Viento, la Zona de Administración y el Palacio Público.
En fin, Bosra es a criterio mío, uno de los lugares imprescindibles que tenemos que ver en Siria de manera obligatoria. Es impresionante y simplemente maravilloso. Si tienen la chance, vayan.
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