Kambadaga Falls – El Amazonas de Guinea

Guinea es un país raro, hermoso, increíble para rutear pero bastante pobre, con nula infraestructura pero con paisajes de otro planeta, con una vegetación exuberante que tiene ganas de comerse la ruta, de hacerla desaparecer. Pero entre tantos contrastes aparecen las poco conocidas y super escondidas Kambadaga Falls, a mi criterio, lo mejor de Guinea.

¿Cómo es Guinea y cuál es su moneda?

Si tuviésemos que dar una breve introducción a Guinea, primero habría que decir que se lo conoce como Guinea-Conakry (el nombre de su capital), más que nada para distinguirla de su vecina Guinea-Bissau. En Guinea se habla francés, la moneda oficial es el Franco Guineano donde 1 EURO = 8550 GNF, y el país tiene un 60% de su población por debajo del umbral de la pobreza. De todos modos, se considera como un país rico en minerales como diamante y oro, y por eso vamos a ver muchas minas que suponen un gran riesgo para la población local.

¿Cómo son las rutas?

Las rutas en Guinea son impresionantes, con todo lo que esta palabra conlleva. Su estado es malísimo, cuando llueve se llenan de pozos y parecen más lagos que rutas, pero la parte buena es que toman un color anaranjado que es simplemente fantástico.

También se pueden ver acá las primeras colinas que le dan algo de magia al paisaje que venía siendo mucho mas llano si venimos viajando de norte a sur. Acá vamos a ver en todos los poblados al lado de la ruta con unas casas en forma de cono que llaman mucho la atención.

¿Dónde quedan las Kambadaga Falls?

Lo bueno de rutear es a veces hacerlo sin un destino claro dejándose perder, algo que no sé si recomiendo en Guinea, o la segunda opción que es moverse y sumar kms para llegar a un lugar determinado. En este segundo escenario, todo el que maneje por Guinea debería hacer una parada obligada en Kambadaga Falls.

A 62km al sur de Labé, muy cerca de Pita se encuentra este paraíso; un lugar dominado por una selva muy tupida con unas cataratas impresionantes que se conocen como «Chutes de Kambadaga«. Si bien dicen que tiene 4 caídas, dos de ellas son imponentes y son las que más llaman la atención. La última parte del camino se pone realmente difícil para hacerlo en auto, y ahí hay que estacionar y prepararse para una larga caminata que tiene 2 paradas.

La primer parada es para dirigirnos a un mirador desde donde vamos a ver las Kambadaga Falls desde lo lejos, pero son unas vistas panorámicas inigualables donde vamos a poder tomar dimensión del tamaño de la selva y por un momento nos vamos a sentir en el propio Amazonas, como si estuviésemos en la zona de Presidente Figueiredo.

Tengamos en cuenta que toda esta zona de Guinea está dominada por Yuta Fallon (Fouta-Djalon), un macizo montañoso que se caracteriza por recibir una gran cantidad de precipitaciones, lo que le dio el apodo de «La torre de agua de África Occidental«. Esto hace que toda esta zona nos regale un paisaje por demás interesante donde abundan los bosques, las selvas, las planicies, los arroyos, los acantilados, los saltos, las cataratas y demás.

Después de ver las Kambadaga Falls desde lo lejos, no nos queda otra opción que emprender la segunda mitad de la caminata para acercarnos todo lo posible al curso de agua. Si bien hay bastante pendiente (por el momento es para abajo, pero cuando querramos volver vamos a tener que subir bastante), el final del recorrido nos tiene un lindo regalo.

Cuando lleguemos al agua nos vamos a encontrar con varios rápidos que esconden algunos piletones donde nos vamos a poder meter con algo de cuidado. Estar tan rodeado de naturaleza en un lugar tan increíble es realmente único y super pero super recomendable; no dejen de hacerlo. Obviamente no van a encontrar a ningún turista en toda esta zona, y eso lo hace aún más apasionante.